Parece que al final nuestra «prima» se va a salir con la suya.
Después de mantener a toda Europa al borde de la quiebra estos últimos años, aplicando el viejo método del palo y la zanahoria, la Merkel, ha conseguido doblegar a la mayor parte de los países europeos, exhaustos económicamente y sin margen de maniobra política ante sus pueblos.
Esta última guerra europea la ha ganado Alemania.
Ángela «von Bismarck» está a punto de imponer sus condiciones, aceptadas ya de antemano una vez que Sarkozy a claudicado en nombre de todos nosotros.
A la tercera va la vencida, y esta vez lo han conseguido, o se hace lo que ellos dicen o hacen saltar el euro por los aires, a esto se le llama responsabilidad.
Nos quedan por delante años de crisis económica y duros ajustes con los que ayudar a nuestros amigos del norte de Europa a mantener su status.
Lo peor de todo es que estamos atrapados, ni contigo ni sin ti, que dice el refrán, salir del euro nos sumiría en la miseria mas absoluta y si nos quedamos dentro del sistema, en unos años los salarios «mil euristas» serán vistos como un sueldazo.
Pinta mal, claro que si, la Europa de todos, esa en la que se tomaban las decisiones por unanimidad, se respetaba a los países mas débiles, se ayudaba los sectores productivos en dificultades se ha acabado y nos pasamos directamente a «ordeno y mando» alemán «HEIL MERKEL».
¿Cuanto hay de crisis en todo esto y cuanto de situación provocada por Alemania?
Sí, efectivamente. Nos hemos convertido ya en un protectorado alemán. Perdieron la primera y la segunda guerra mundial, pero han ganado la tercera, que es mucho más sofisticada, pues ya no se invade un país provocando una guerra, sino comprándolo y ya está. Es más «económico».