La EPA (Encuesta de población activa), que ha hecho pública el INE (Instituto nacional de estadística) ha puesto de manifiesto que durante el primer trimestre se han destruido 184.600 puestos de trabajo, creciendo de esta manera la tasa de paro hasta el 25,93%.
Siete de las diez regiones con más paro de la Unión Europea son españolas.
Tenemos ya casi 2.000.000 de hogares con todos sus miembros en paro.
Este último trimestre el paro ha descendido cuatro «centésimas», apenas 2.300 personas.
La caída de la población activa en el último año se acerca a las 425.000 personas.
Más de un millón de personas han desistido de buscar empleo.
Una cifra que no me atrevo a cuantificar ha «emigrado» para poder vivir.
El empleo a tiempo completo se transforma en empleo a tiempo parcial a un ritmo asombroso.
Hay ya casi 800.000 hogares sin ningún tipo de ingreso.
Todos estos datos, claramente desastrosos, no desaniman a nuestro gobierno, que ante la llegada de 2015 (año electoral), se empeñan en ver la botella medio llena.
Claro está que desde la comodidad de un copioso sueldo fijo, además de complementos para pagar alquileres que no existen, etc,… los problemas se ven de otra manera.
El pais se desangra, la actividad industrial ha caído, el turismo, por si solo, no consigue absorber el paro provocado por otros sectores, la banca aumenta sus beneficios a costa de los múltiples rescates del gobierno.
La situación, para los que no vivimos de un sueldo público, es claramente desesperada.
Y ante estas evidencias, Rajoy ha dejado muy claro lo que piensa.
«Estoy muy contento»