Por si no están enterados les aviso, el 29 de Septiembre, de este año, habrá Huelga General en España. Queda lejos, la verdad, pero ya saben, estamos cortos de fechas, el mundial, las vacaciones, las fiestas populares de los distintos pueblos, después ya viene el inicio del curso, la liga de fútbol, la lluvia de fascículos que nos invaden todos los años, incluso antes, está mi cumpleaños y ya al final la «ansiada» Huelga General. Nunca una Huelga se avisó con tanto tiempo.
Seguramente el reciente fracaso de la huelga de funcionarios ha provocado esta convocatoria «diferida».
Se dan tiempo los sindicatos a si mismos, a ver si encuentran en todo este tiempo, razones con las que justificar esta «sin razón».
En tiempos de penuria las posiciones netamente ideológicas tienen poco recorrido, hay que hacer lo que hay que hacer. En el pasado le tocó a Felipe Gonzalez abordar una reconversión industrial que seguramente le resultó dolorosa e incómoda, y llevó al paro a muchos trabajadores. Pero con aquel esfuerzo se sentaron las bases para modernizar el país. Puede que hayamos encontrado la palabra clave «modernizar».
Los transportes, las autopistas, los aeropuertos, el país en general, se ha modernizado. Pero en este proceso, en el que llevamos trabajando los últimos 30 años, se nos han quedado atrás los sindicatos. A poco que rascas te salen con antiguas luchas ya superadas, que si los grises, las cárceles del franquismo, bla, bla, bla,… mucho rencor acumulado, mucha ideología ya superada y pocas razones objetivas. Los postulados de aquella época no valen ya para estos tiempos, no podemos seguir hablando de empresarios malvados, corruptos y explotadores en contraposición a trabajadores beatíficos, solidarios y super responsables. La dialéctica del enfrentamiento ya no funciona, sobre todo porque el 80% de los empresarios de este país son autónomos, que tienen menos derechos que sus propios empleados y menos coberturas sociales. Y los trabajadores, que son mucho más sensatos que los sindicatos, lo saben y por eso la pequeña empresa se mueve al margen de estas organizaciones que poco a poco van perdiendo su razón de ser y con ello sus afiliados y su fuerza reivindicativa.
Me gustaría un sindicato que no tuviera «liberados», como la CNT, por ejemplo. Que no viviera de los presupuestos del Estado vía subvención. Un sindicato «independiente» no adscrito a un partido político concreto al que deber obediencia. Un sindicato que financiara a sus afiliados los días que pierden por una huelga, y de esta forma poder luchar de verdad contra una gran empresa hasta las últimas consecuencias. Un sindicato con una verdadera política de formación del trabajador. De ilusión también se vive.
Que porqué se ha convocado la huelga? Según Mendez y Toxo «no es para cambiar al Presidente del Gobierno».
Yo propongo que ya que estamos y como está claro que los sindicatos van derechitos a un fracaso histórico, podríamos «cambiar» a los dos «Presidentes» de sendos sindicatos y que dejen su puesto a alguien valiente de verdad que sepa impulsar la modernización que necesitan, a no ser que se hayan propuesto enterrar ellos mismos el movimiento sindical dada su incompetencia.
Cuanta razón…